lunes, 21 de marzo de 2011

Debido a ti...

No cometeré los mismos errores que tu cometiste.
No dejare que yo misma cause miseria a mi corazón.
No me desmoronare de la misma manera en que tu lo hiciste, el golpe fue muy fuerte.
He aprendido de la forma más difícil a no dejar que las cosas se me vallan de las manos.
Pierdo mi camino, y no fue mucho antes de que me lo indicaras.
No puedo llorar, porque sé que para ti eso significa debilidad.
Me siento forzada a fingir sonreír todos los días de mi vida.
Mi corazón no puede romperse, si para empezar, nunca estuvo entero.
Te vi morir, te oí llorar, cada noche mientras dormías.
Era tan joven… debiste haberlo pensado mejor antes de apoyarte en mi.
Nunca pensaste en nadie más que no fueras tu, solo veías tu dolor.
Y ahora lloro en mitad de la noche por la misma maldita estupidez.
Debido a ti, nunca me aleje tanto de la acera.
Debido a ti, aprendí a no correr riesgos para no salir nunca lastimada.
Debido a ti, hago lo imposible para olvidarlo todo.
Debido a ti, no sé cómo dejar a alguien entrar a mi vida.
Debido a ti, estoy avergonzada de mi vida, porque está vacía.
Debido a ti, tengo miedo.
Debido a ti…
A ti...

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